REPORTAJE (Elvira)

EL SIDA, SU PREVENCION EN LA ADOLESCENCIA
“En tu tren de vida, cuidado con el SIDA”

Por Elvira del Carmen Pimentel Cruz, para EDUNEWS, el Periódico Educativo

El SIDA es una epidemia mundial que en Latinoamérica está presente desde la década de los 80’s; afectando principalmente a la población adolescente. En México la Secretaría de Salud reportó que hasta el dos mil nueve había doscientos veinte mil casos reportados de este padecimiento en personas de 15 a 49 años de edad viviendo con el Virus de Inmunodeficiencia Adquirida (VH).
Los adolescentes son más vulnerables al contagio por diversos factores entre los que se encuentran la falta o caso omiso a la información sobre el tema, además de que en muchas regiones la enfermedad y sus implicaciones son consideradas como tema tabú.
Estudios realizados en el mundo han arrojado que las vías de contagio son tres:
a) a través del acto sexual en forma heterosexual u homosexual
b) al haber intercambio de fluidos como sangre y hemoderivados, así como semen u órganos donantes, y
c) por vía perinatal, de madre a hijos durante o seguidamente al parto.
En Latinoamérica la mayor incidencia de transmisión es por las dos primeras vías, considerando el contagio a través de jeringas infectadas entre drogadictos intravenosos.
La adolescencia aumenta la vulnerabilidad al Virus de Inmunodeficiencia Adquirida (VIH), ya que es en esta etapa donde los jóvenes no miden consecuencias de sus actos, intentan experimentar con cosas y situaciones peligrosas o bien, por rebeldía o desafío dejan a un lado el riesgo de contraer esta enfermedad o cualquier otra de transmisión sexual, así como exponerse a situaciones como embarazos no deseados o caer en adicciones a las drogas.
Con la edad se ve aumentado el grado de responsabilidad en los jóvenes y pueden tener más acceso a la utilización de métodos anticonceptivos y estar informados sobre el uso adecuado de ellos. En la adolescencia aunque se tenga el conocimiento y la información al alcance es difícil que una persona de esta edad sepa de la utilización adecuada de un condón.
La percepción de la sexualidad varía dependiendo de la edad, para los jóvenes puede resultar placentero el vivir una sexualidad plena y responsable, teniendo comunicación con sus parejas; para los adolescentes puede ser un tema prohibido dependiendo de su educación familiar, su entorno socioeconómico o bien ser algo que motive su curiosidad por conocer y vivir.
Las adolescentes son más propensas a empezar de manera temprana su sexualidad por presiones de su pareja y al sentirse rechazadas por no ceder a los deseos de sus compañeros se adentran a este mundo sin conocer la forma de prevención y protección para embarazos no deseados.
En el caso de las drogas los menores de edad también son vulnerables a experimentar en el uso de sustancias tanto inhaladas como por vía intravenosa, debido a la presión de los amigos, problemas familiares, falta de información, rebeldía o por solamente curiosidad.
Una alternativa fundamental en la prevención del SIDA en los adolescentes es el uso de la información por las vías adecuadas, implementación o modificación de programas ya existentes y que son realizados por la Secretaría de Salud y por instituciones como CONASIDA.
Sería interesante poner mayor énfasis en la forma de llevar la información a los menores y complementarlos con programas dirigidos a jóvenes mayores y padres de familia.
Así mismo, conjugar las campañas de prevención de drogadicción con las de SIDA, sería una forma de dar información más completa a todos los sectores de la población, considerando la participación activa de las personas infectadas, dando testimonio de sus casos para que se conscientice de manera amplia sobre las consecuencias de actuar de manera irresponsable ante este mal latente que afecta sin importar a quién.
Actualmente el Centro Nacional de Prevención y Control del VIH/SIDA (CENSIDA) en colaboración con la Dirección General de Plantación y Desarrollo en Salud (DGPLADES) están llevando a cabo el proyecto de “Prevención de la infección de VIH en poblaciones vulnerables”, que son: homosexuales, hombres y mujeres dedicados a la prostitución y usuarios de drogas inyectables.
Este programa se concentra mayormente en poblaciones donde se concentran el mayor número de casos con incidencia mayor de 500 casos de SIDA por un millón de habitantes, o con más de 300 casos acumulados.
Como se ha visto el SIDA afecta mayormente a la población adolescente, pero también a la población en general, en nuestro país tiene mayor incidencia en personas que practican relaciones homosexuales, prostitución y consumen drogas inyectables.
El problema es grave y la forma de prevención es la implementación de programas llevados a cabo por el Sector Salud y otras instituciones no gubernamentales en escuelas y centros de trabajo, a través de medios de comunicación masiva
Es importante destacar el papel de la familia como principal proveedor de información para los adolescentes, por lo que la educación a los padres de familia sobre como tratar asuntos de sexualidad y prevención de drogadicción es fundamental para que ellos sean los primeros en educar a sus hijos sobre estos temas.
Y es importante no olvidar que no sólo es prevención sino que hay que prestar atención a las personas ya infectadas, brindarles tratamiento y educar a la población para que no sean objeto de rechazo y discriminación por estar contagiadas de una enfermedad de la que todos podemos ser víctimas.